91358487_3308702952482435_2219222074428227584_n

1. Aunque te quieras quedar en la cama o sientas que el sofá es tu lugar de hibernación favorito, levántate y báñate. El agua te ayudará a relajarte y te invadirá una sensación placentera.

2. Ponte perfume, la activación sensorial del olfato nos ayuda a conectar con una emocionalidad más agradable. Nuestra memoria emocional evoca recuerdos a través de los olores.

3. El reflejo de nuestra imagen debe ser positivo, por lo que arreglarse, aun con ropa cómoda, y sentirse guapa/a frente al espejo, favorecerá el equilibrio del estado de ánimo.

4. Pese a no poder salir de casa, podemos salir al balcón, terraza, ventana… respirar aire fresco, nutrirnos de los rayos de sol y disfrutar de ese momento de manera consciente.

5. Sonríe. La mente no diferencia una sonrisa espontánea de una forzada, así que deja que las emociones agradables, que proporciona una sonrisa, te llenen de energía positiva.

6. Presta atención a tu alimentación. Comer sano y beber mucha ayuda, favorecerá a dos de los neurotransmisores más importantes del estado de ánimo: serotonina y dopamina.

7. Ámate, respétate, sé sincero/a contigo mismo/a. Lleva tu mente a la calma y la serenidad. Si te cuesta, permanece en silencio, tu voz interior te dará las mejores respuestas.

8. Recuerda, esto también pasará. Aunque no sepamos el día, sí sabemos que tiene un fin, por lo que centrarnos en lo que vamos consiguiendo, y no en lo que nos falta, será una estrategia emocional ideal para sacar nuevos aprendizajes de todo esto.

9. Y si hoy sientes que no puedes, no pasa nada. Para, respira, descansa, que mañana será otro día y te brinda una nueva oportunidad.

CIARA MOLINA
Psicóloga Emocional
Ciaramolina.com